Enrique Romay nace en 1951 fundada por Enrique Romay Escribá. En sus inicios la empresa se dedicó a procesar de forma manual y comercializar cebollas en un almacén de apenas 500 metros cuadrados, pasando en pocos años a hacer los mismo con las naranjas y  las clementinas. Ya desde sus inicios, el abuelo Enrique tuvo la visión de tener una parte del negocio enfocado a atender al mercado Europeo, viajando con los agentes de la época a visitar a sus clientes en el extranjero y exportando gran parte de sus productos.

El fundador y su mujer Amparo, tuvieron dos hijos Enrique y Amparo, actuales administradores de la sociedad, y los impulsores del crecimiento y desarrollo del negocio en todas sus dimensiones: producción propia, ampliación de las instalaciones, cualificación del personal, apuesta por las tecnologías, procesamientos automáticos, trazabilidad,…